"En la medida que consigamos consenso político, conseguiremos consenso social", añadió, asegurando que la decisión es "muy fundada", ya que se basa en la "protección de la salud". "Estamos culturalmente preparados para adoptarlo ya, y estamos en esa fase final de la negociación", concluyó.
Por su parte, los hosteleros españoles podrían perder más de 30.000 millones de euros en 2010 con este endurecimiento de la Ley Antitabaco. Una iniciativa que consideran dará la "puntilla" a los medianos y pequeños establecimientos que sobrevivan a la crisis. El adjunto al presidente de la Federación Española de Hostelería, José Luis Guerra, señaló que la crisis ya ha generado un 20 por ciento de pérdidas en el sector y que en 2010 experimentará "una caída adicional del 10 por ciento" con la prohibición de fumar en todos los locales.
Además, destacó que la hostelería está pasando por una "grave crisis" y "miles de empresas familiares han sufrido caídas del 20 por ciento y esta prohibición dramática sumará una caída adicional del 10 por ciento".
Unas pérdidas que se sumarán al dinero invertido por los propietarios de locales con una superficie superior a 100 metros para que sus clientes pudieran fumar, en base a la actual normativa.
Para Guerra, de los 70.000 locales con superficie superior a 100 metros que hay en España, entre 40.000 y 50.000 hicieron reformas para que sus clientes pudieran fumar, según la actual normativa.