En mayo los estudiantes celebraron los 100 días antes de los exámenes disfrazándose.
Un fin de semana, Martyna y yo fuimos a una feria que se celebró en un pueblo cercano, Mourenx, con temática Polinesia francesa, donde pudimos probar dulces hechos con coco y ver sus bailes.
En el instituto, seguimos dando clases de apoyo por las tardes para los estudiantes que se irían de prácticas al extranjero en junio y además, trabajamos en un proyecto para la toma de acción contra la huella de carbono. Este proyecto consistió en que, los días que hiciera buen tiempo, iríamos al instituto en bicicleta en vez de usar el coche.
La organización Pistes solidaires nos proporcionó además, una plataforma llamada act'EVE, donde estaban disponibles retos para adoptar un estilo de vida más sostenible.