Así es como llegó para nosotros el 2020 y, con él, la vuelta al trabajo, aunque gracias a estar viviendo esta experiencia no se hace tan cuesta arriba.
Durante este mes hemos llevado a cabo actividades en los dos centros. Por un lado, en Nazorova, hemos dado apoyo en las terapias sensomotrices de los/as más peques. Esto nos ha permitido trabajar con todos los grupos y aprender sobre las diferentes dificultades y técnicas empleadas por profesionales del centro.Por otra parte, en el centro Ilica, continuamos nuestro proyecto de realizar video curriculums con quienes finalizan este año la secundaria. Concretamente, realizamos un taller sobre qué tipo de trabajo encaja más con sus preferencias y características personales y acudimos a una feria de empleo con ellas/os en búsqueda de información y futuras empresas empleadoras. Ahora ya solo queda una cosa... ¡Grabar!
Ha sido un mes muy intenso y lo que viene por delante no parece serlo menos. Por suerte, tenemos energía para eso y más, gracias, en gran parte, a la visita tan especial que recibimos desde España. Con las pilas cargadas a tope, estamos deseando nuevos retos y aventuras.
Este mes escribo con retraso ya que hemos tenido problemas con el internet y además tuve COVID, pero eso os lo contaré en la próxima entrada. A principios de mayo fuimos a Saint Paul de Vence, una villa que esta como a media hora de donde vivimos. Es un sitio muy turístico lleno de galerías de arte, tiendas de souvenirs, bares, restaurantes y, como no pueden faltar, creperías y...
¡¡Bueeenas!! Ya estamos en junio, a menos de un mes de acabar mi voluntariado y me da mucha pena... aunque también tengo muchas ganas de volver a casa y encontrarme con los míos :)