Europa

22.01 - 28.01

El jueves, para el grupo de conversación en inglés, Kimi y yo hemos decidido proponer a los participantes jugar a "Tabú". Para quienes no lo conozcan, tabú es un juego de equipo, para el cual los jugadores tienen que hablar en inglés, y emplear en la manera mejor que puedan su vocabulario. Por esa razón, nos pareció una actividad interesante y divertida al mismo tiempo que para practicar la lengua.

Antes de que el juego empiece, los equipos escriben sobre papelitos unas palabras inglesas y, para cada una de estas, escriben también tres palabras "tabú". En turnos, un componente de cada grupo tiene la tarea de describir una palabra elegida por el otro equipo, y sus compañeros deben intentar adivinarla. Claramente, durante esta descripción, rigurosamente en inglés, está prohibido decir la palabra y las tres palabras "tabú". Creo que los dos momentos del juego - por la mañana a las 12.00 y por la tarde a las 18.30 - han sido bastante apreciados. Mi opinión es que es recomendable, de vez en cuando, proponer una actividad diferente en los grupos de conversación para romper la monotonía.

Durante muchas mañanas de esta semana, seguimos visitando las escuelas de Gijón para desarrollar nuestras actividades informativas sobre ocio y salud. Hemos utilizado varios recursos para hacer que el debate entre los estudiantes empezase. Por ejemplo, propusimos un juego de rol. El objetivo del juego era reflexionar sobre lo que se podría hacer para conseguir una reducción del consumo de alcohol entre los menores de edad. Más en detalle, en cada clase, hemos dividido a los chicos en cuatro grupos, los cuales representaban entidades sociales y políticas que están involucrados en este tema y que son los responsables del enfrentamiento. Los grupos estaban compuestos por: dueños de pubs y bares, padres de los chicos, representantes del ayuntamiento y, por fin, los mismos jóvenes. Me pareció una dinámica interesante y útil para estimular el debate. Creo que poniéndose en los zapatos de las entidades que he mencionado antes, los estudiantes se dieron cuenta de que es bastante complicado encontrar una solución que vaya bien para todos y que siempre hay que tratar con la diversidad de intereses.

En cuanto a mi tiempo libre, sigo intentando estudiar. Ahora en Gijón tenemos días bastante fríos y lluviosos, como es normal en enero, así que salir de casa no me apetece mucho más que quedar en mi piso. Es mejor aprovechar lo que hay, y contentarte.