Europa

Hallo!

El invierno ya está llegando a su fin (mentiría si dijese que no me alegro por ello...), pero he de decir que este invierno ha sido uno de los más bonitos de mi vida.La Navidad en el centro de Europa, puede que sea el evento más esperado del año; cuando yo aún ni había pensado en ello, todas las tiendas estaban preparadas para "das Weinachten"  (Navidad en alemán).

Para mí, al trabajar en una guardería, la Navidad empezó con Sankt Nikolaus; es una tradición alemana en la que, la noche del 6 de diciembre se deja un calcetín/zapato cerca del árbol y St Nikolaus deja a los niños chocolates y dulces. Tuve la suerte de conocer en primera persona al mismísimo St Nikolaus en una visita a nuestra guardería (no Le note ninguna diferencia con Papa Noel, pero por supuesto, no dije nada).

Otra de las tradiciones alemanas son los tan famosos, mercadillos de Navidad, hasta el pueblo más pequeño de Alemania tiene aunque sea un par de puestos. Es el claro reflejo del espíritu de la Navidad que tienen aquí, ha sido toda una experiencia salir de trabajar e irnos a tomar Glühwein (vino caliente) al mercadillo, porque bueno, como creo todo el mundo sabe, en Alemania bebe alcohol está más que socialmente aceptado jaja. Además durante esta época también hay comidas y platos especiales, lo que hace que el centro de la ciudad tenga un olor super especial. 

Durante estas fechas suele haber muchísimos conciertos y eventos especiales, en Karlsruhe por ejemplo, hicieron un musical especial de Navidad, gratuito. Sin lugar a dudas uno de los musicales más bonitos que he visto en mi vida. Merece la pena viajar y visitar más mercadillos, porque aunque al final todos estén cortados por el mismo patrón, es un momento  especial para conocer algunas ciudades, yo por ejemplo aproveché para visitar Estrasburgo.

Por otro lado, y como no podía ser de otra manera, con el frío llegó la nieve. Toda la ciudad se tiñó de blanco y aprovechamos para disfrutarla al máximo. Tuve la suerte de pasar la nochebuena y Navidad en España, en mi casa. Algunos de mis compañeros de piso no pudieron volver a sus casas, decidimos entonces hacer una cena de Navidad todos juntos en la casa. Sin duda alguna, recordaré siempre esa noche, una celebración de Navidad en Alemania rodeada de mis compañeros de piso, ya que será muy muy complicado volver a disfrutar con ellos otra Navidad. Espero que mi próximo Blog lo pueda escribir sin guantes y bufanda!!

Mit freundlichen Grüßen, 

Mónica