Europa

Tenía muchas ganas de escribir esta entrada. La verdad es que cuando se subió la anterior acababa de volver de donde os voy a contar, pero decidí que se merecía más espacio que un párrafo al final. 

Sin embargo, no vamos a empezar por ahí ya que primero quiero comentar algunas cosillas que he estado haciendo en la organización.  En primer lugar, mencionaré brevemente el cine que hemos preparado en la casa. Pasamos una encuesta con películas propuestas y, finalmente, salieron dos: Wall-E y Singing in the Rain.

En segundo, diré que gracias a que llegó el DBS hemos comenzado a acompañar a personas de la casa al exterior de esta. Lo creamos o no, que respiren un poco de aire fresco del parque, o ir a tomarse un té o un helado puede significar sentirse, o no, parte de la comunidad. Como ocurre con las personas que residen en este tipo de edificios, ya sea con diversidad funcional o ancianos, corren el peligro de institucionalizarse puesto que la sociedad tiende a olvidarse de ellos. Novamos a dudar que gracias a estos servicios tienen sus necesidades biológicas cubiertas, están atendidos 24 horas por profesionales sanitarios, pero, ¿qué sucede con las esferas psicológica y social de la persona? Tendemos a no pensar en esto, ya sea porque no vemos estas personas en los espacios públicos, porque creamos que sus capacidades son inferiores, o el motivo que cada uno se quiera poner, cuando no existe razón para negarles su libertad y mucho menos si la diferencia descansa en algo tan sencillo como un paseo.    

Creo que he empezado enrollarme. ¡Ah! De lo que quería hablar era de que este mes, en una de estas salidas hemos ido a una carrera para caballos, ¡cómo en las películas! Recuerdo ver en My Fair Lady este evento reservado para la clase alta de la sociedad. Obviamente, diría que a día de hoy está abierto a todo el mundo, pero yo creo que el ambiente sigue siendo un poco posh. Carreras que parecen durar un pestañeo, mientras funciona la casa de apuestas y, en los descansos de media hora entre una y otra, puedes disfrutar de una pequeña actuación musical o comprar un caballo en la subasta. Afirmaría que This is not my cup of tea, pero oye, ¡estar he estado!

Mi cumpleaños cae cada año (aunque parezca mentira) el 25 de Agosto, y este lo he pasado un poco lejos de casa. Amenizado principalmente por mi compi de voluntariado, pero también por la gente del centro de día. Además, aprovechamos la tarde para ir a comer hindú, lo que me lleva a hablar de otro tema. La comida.

Todo el mundo me advirtió lo horrible que era la gastronomía inglesa. Yo aún me estoy debatiendo si es que no tienen, si es que hacen unas cosas muy raras con la comida (como el mushy peas), o si es que no son platos que llamen tanto la atención. No obstante, lo que está claro es que, como contrapunto, puedes encontrar cocina extranjera mucho más fácilmente. Desde que estoy aquí heprobado sobre todo comida hindú, pero también tailandesa, turca... más accesible, variado y de calidad de lo que me había encontrado en España. ¡A comer! 

Finalmente, y como ya habrás adivinado si eres un verdadero fan (y si no, pues yo te lo cuento), en Agosto nos dejamos caer por los Estudios Warner Bross ubicados en Watford, dedicados a Harry Potter y la producción de sus 8 películas. No puedo decir más que esto: impresionante.

 Aquí se ve: Normas de Umbridge, su despacho, artefactos, Privet Drive, maqueta de Hogwarts,el puente, Callejón Diagón, Tapiz familia Black, Despacho de Dumbledore, maniquíes del gran comedor y del baile.

Lo primero, entras por la puerta del gran comedor, y allí están las mesas, las chimeneas y maniquíes de todos los profesores en la mesa principal. A partir de ahí es un no parar: el péndulo de la 3ª película, la puerta de la cámara secreta, los trajes del baile de la 4ª, las varitas, la casa común de Gryffindor y sus dormitorios, los objetos, la estación de tren, el Callejón Diagón, la maqueta de Hogwarts y un largo etcétera. Para mi, habiendo crecido con esta saga y devorado cada libro, ver todo eso era como sufrir Síndrome de Stendhal. ¿Que si repetiría? Sin duda :)
Y aquí vestidos, cómo no, con la toga de Gryffindor.

Y hasta aquí. Para el mes que viene tengo algo muy chuli preparado, ya que nos vamos a Kielder, ¡Ya Glasgow! Once more, muchas gracias por leerme, y hasta la próxima :)