Europa

El pasado fin de semana me tocó unirme a los 'youth workers' en su actividad de dos días en Carlingford (en la frontera con Irlanda del Norte). Esto me dió la oportunidad de tratar más directamente con los jóvenes que acuden regularmente a la YMCA como punto de apoyo en su educación y sus relaciones sociales. Mi misión era hacer fotos y vídeos que luego puedan enviarse a los patrocinadores y los donantes corporativos que han entregado dinero con este fin, como forma de darles las gracias y demostrarles el beneficio que su dinero tiene en las vidas de estos jóvenes.

Tras nueve meses aquí conozco mejor los problemas a los que se enfrentan las familias del centro de Dublín (drogas, alcohol, bajos recursos) pero tras dos días conviviendo con sus hijos, tengo que decir que lo más peligroso de todo es la falta de educación y las pocas oportunidades de ver mundo. Me explico: se puede ser una persona culta y educada sin poner un pie fuera de tu región si lees, te informas...hay mil maneras de hacerlo. Pero si no tienes el estímulo para hacerlo, la ignorancia puede perseguirte toda la vida y se la traspasamos a los hijos, como de hecho ocurre, por desgracia. Los padres son así porque su infancia fue exactamente -o peor- como la que están dando a sus hijos. Si nadie hace nada por romper este ciclo, se seguirá transmitiendo...

Pues bien, estos chavales no sabían lo que era un almendra, por ejemplo. Cuando me vieron comiendolas alucinaron, y cuando uno se atrevió a probarla, casi vomita. Poco más tarde descubriría el porqué: muchos de ellos solo comen beans con tomate, bacon, patatas fritas, hamburguesas, chips y pizza. Y no estoy resumiendo. Su cultura gastronómica es superreducida porque la de sus padres es así también. Y esta actitud se extiende a todo: el interés hacia el colegio, las actividades que propone la YMCA...Y el cuidado de los hijos como tal. No me cabe en la cabeza que alguien pueda mandar a su hijo sin siquiera cinco euros para cenar cuando explícitamente se avisa antes de que hay una comida de pago (el resto es todo gratis, gracias a las donaciones).

Dicho esto, creo que ha sido una influencia buenísima para ellos pasar dos días fuera de ese entorno de apatía y dejadez y lanzarse a hacer laser tag, canoas, juegos al aire libre...Puede no sonar a gran cosa, pero es que ellos no van nunca si la YMCA no los lleva. En Julio, durante el Summer Project, hay más viajes de un día previsto por ejemplo a la playa o al parque acuático y espero ir con ellos. También creo que están necesitados de roles jóvenes positivos y les conté alguna historieta sobre mi trabajo de periodista, la universidad, o la vida en Spain...Creo que eso forma parte también del espíritu del EVS y me siento muy satisfecha de haber aportado mi granito de arena.