USUARIOS
 MENU
europa

Europa

Cuatro meses y medio. Cuatro meses y medio. - João Fernandes - SVE en España

Estamos a mediados de octubre y ha pasado la mitad de mi proyecto de voluntariado en Gijón. Me parece que el tiempo ha volado y ahora siento que nueve meses son, a fin de cuentas, un periodo demasiado corto. Recuerdo cuales eran mis expectativas antes de venir, recuerdo enseguida lo que he hecho y cumplido en estos últimos meses y concluyo fácilmente que todo ha valido la pena. Esta está siendo una de las experiencias más importantes de mi vida a nivel personal, profesional y formativo.

He aprendido a hablar español, o por lo menos puedo hacerme entender por otros, he conocido gente estupenda, he aprendido a vivir sólo y he viajado por lugares inolvidables. Toda la experiencia, en general, ha hecho con que yo sea una persona más rica, con más de que hablar, con mejor conocimiento sobre muchas cosas que ya me interesaban antes y, en resumen, me siento hoy más satisfecho con lo que hago.

 

Hay muchas cosas sobre mi vida que entiendo ahora mejor que antes. Y pienso a menudo en los dos voluntarios europeos que estaban aquí en Gijón antes que Ana y yo llegáramos: al contrario que nosotros, que ya teníamos veinticuatro años, habíamos terminado nuestra carrera e incluso nuestro master, y que llegamos con alguna experiencia en un trabajo como este, Artem y Victoria tenían dieciocho y diecinueve años, ninguna experiencia y todavía no habían empezado sus carreras. Habían terminado el bachillerato y decidieron venir a España a hacer nueve meses de voluntariado antes de elegir una carrera que siempre es, o debe ser, una decisión tomada con una visión consciente a largo plazo. Y ahora explico el porqué de pensar en ellos tan a menudo: cuando estábamos en nuestra formación a la llegada, en Valladolid, una de las facilitadoras nos dijo que muchas veces es a lo largo de nuestro proyecto europeo de voluntariado cuando descubrimos qué queremos realmente hacer en nuestra vida. A lo mejor, Artem y Victoria, que empezaron ahora sus carreras, están más seguros de lo que quieren de lo que yo estaba cuando tomé esa decisión. Hoy, hay muchas cosas que yo veo con una mirada distinta, y muchas decisiones no las tomaría del mismo modo. Y eso porque me conozco mejor.

 

Ese aprendizaje personal, que es importante para que tengamos un rumbo y cualquier éxito en nuestras vidas, es una de las cosas que quiero profundizar en los cuatros meses y medio que me quedan de proyecto. Quiero reflexionar sobre mí mismo hasta que pueda elegir qué hacer con mi vida después de marzo. Quiero leer más en español de lo que he leído, y eso significa que tendré que aprovechar aún mejor el tiempo libre del que dispongo. Quiero conocer más gente, seguir yendo al gimnasio cuatro o cinco veces a la semana y me gustaría aprender a cocinar algunos platos más.

  

Ayer, durante una de las sesiones del grupo de conversación en inglés, hablábamos sobre viajar en el tiempo, volver al pasado y cambiar el futuro, y hablábamos también de planes que teníamos para nuestro futuro. Y yo les dije a todos que apenas hago muchos planes sobre mi futuro, aunque tenga muchas ideas sobre ello, pero que siempre hago muchos planes sobre viajes que quiero hacer en el futuro. Y los viajes, al contrario de los demás planes, yo nunca los aplazo: establezco un orden cronológico para los viajes que quiero hacer, cuando los podré hacer, etc. Y sobre los lugares que todavía quiero visitar mientras estoy en España, pasa lo mismo: sé exactamente a dónde quiero ir y tengo planes de cuándo iré a cada uno, aunque esos planes podrán cambiar mucho debido a circunstancias sobre las que no tengo ningún tipo de control. He ido a Santiago de Compostela, a Lugo, a Cudillero, a León, a Bilbao, a San Sebastián, a Valladolid y a Salamanca. El próximo fin de semana voy a Cantabria y quiero todavía visitar Astorga y Ponferrada (en noviembre o enero) y también La Coruña (en enero o febrero). Quero aún volver a Avilés y a Oviedo para visitar sus museos, quiero ir a Cangas de Onís y a Covadonga durante un fin de semana y, si puedo, a Madrid durante el puente de la Constitución, en diciembre. 

En fin, mucho me queda por hacer, cumplir y visitar a lo largo de estos cuatro meses y medio hasta el principio de marzo. Así que no puedo relajarme, sino hacer que todo esto sea posible, para que, al final de estos meses, yo no me arrepienta de no haber hecho todo lo que quería y de no haber correspondido a las expectativas que tenía cuando vine. Cumplir todo esto es muy importante para mí y no tengo la intención de fallar.

De vuestro amigo,

João

<< volver

Te interesa

Dos semanas de vacaciones con mi novio - Lilli Martin Dominguez desde Gijón

Esta es mi primera entrada en el blog en tres semanas y tengo la sensación de haber olvidado todo lo que he estado haciendo. Así que para poder escribir esta entrada en el blog, he tenido que repasar la galería de fotos de mi móvil para poder volver a recordar...

La Ola española: semana 28-29 ☀️

!Hola de Ola!

¿Por qué los gijoneses tienen los culos mojados? 😀

La Ola española: semana 25-27 ☀️

!Hola de Ola!

Hace poco alguien me dijo que "La casa de papel" - una serie española - está basada en el ataque al banco en Gijón en 1923. Mi estudio reveló que...