El 42% de los pacientes deja de fumar gracias a los grupos antitabaco de los centros de salud.

El Ayuntamiento organiza talleres para fumadores en los centros municipales y edita guías especiales para jóvenes.

El 42,7% de los 157 fumadores que han participado en lo que va de año en los programas de deshabituación tabáquica que tienen lugar en los centros de salud de Gijón pudo celebrar ayer el «Día mundial sin tabaco» con los cigarrillos muy lejos de sus labios. ¿Un porcentaje alto o bajo? El normal si se tienen en cuenta las estadísticas de años anteriores. Y es que al analizar la evolución de los 387 fumadores que pasaron por estos programas en el área sanitaria V en los diferentes grupos formados entre los años 2008 y 2010 se observa que el 47% dejaba el tabaco al finalizar el tratamiento, pero el porcentaje se rebajaba al 40 y 38%, respectivamente, al hacer los controles de seguimiento al pasar seis y doce meses de la finalización del trabajo de grupo en el centro de salud. Eso si, quienes fracasan en su intento de dejar el tabaco logran por lo menos una reducción significativa del consumo diario de cigarrillos, según los datos aportados ayer por la Consejería de Salud y Servicios Sanitarios del Gobierno del Principado de Asturias.

Ahora mismo hay en marcha en el área sanitaria V un total de 15 grupos de trabajo con fumadores que quieren dejar de serlo, distribuidos en nueve centros de salud del área y liderados por personal de enfermería de atención primaria. ¿Quiénes quieren dejar el tabaco al margen de su vida? De nuevo es la estadística quien establece el perfil de una mujer de unos 50 años de edad y que lleva ya tres décadas «enganchada» al tabaco. El desglose por género, a partir del análisis de esos 387 fumadores que pasaron por el programa de deshabituación tabáquica, habla de un 60% de mujeres frente a un 40% de hombres. La edad media de los participantes en estos programas es de 51 años y la antigüedad en el consumo se fija en 30,5 años. Otro dato para el análisis: el consumo medio antes de iniciar el tratamiento es de 22,8 cigarrillos. El nivel de dependencia del tabaco es medio.

A estos grupos de deshabituación que tienen lugar desde hace años en los centros de salud se unen ahora a través de la Fundación Municipal de Servicios Sociales una serie de talleres que se desarrollarán en los centros municipales de los barrios y en horario de tarde para facilitar el acceso de mayor número de personas. Ahora mismo hay en funcionamiento uno en La Arena y la intención es ampliar la cobertura a partir del próximo mes de septiembre. El diseño inicial de estos talleres, que son gratuitos y tienen lugar de siete y media a ocho y media de la tarde, es movilizar a un máximo de 25 personas a las que se exige el compromiso de asistir a las seis sesiones que integran la terapia. Están pensados para la población adulta en general.

Todas estas cifras y propuestas confluían ayer con motivo de la celebración del «Día mundial sin tabaco». Una jornada de reflexión y sensibilización en la calle que en el caso concreto de Gijón, y gracias a la coordinación de la Fundación Municipal de Servicios Sociales con el Conseyu de la Mocedá y Cruz Roja, se dedicó especialmente a los jóvenes para intentar hacerles llegar un mensaje de rechazo al tabaco a sus lugares de ocio. Todo ello, desde el reconocimiento de que chicos y chicas llegan al tabaco por primera vez con 14 años, que no es su centro educativo el único espacio donde deben encontrar información y, desde luego, no son los usuarios más habituales de los centros de salud.

Bajo esas premisas, voluntarios de Cruz Roja Juventud y el Conseyu de la Mocedá salían ayer a la calle para repartir material divulgativo pensado especialmente para desvincular del tabaco a gijoneses de entre 14 y 20 años. La Fundación Municipal de Servicios Sociales, que preside la concejala Esperanza Fernández Puerta, se encargó de la edición de 10.000 folletos con información que sensibilice a los jóvenes y les aleje del consumo del tabaco y de 2.000 guías con información básica y sencilla para dejar el hábito. Todo este material, que cuenta con el aval del Plan sobre Drogas del Principado de Asturias, es accesible también a través de la página web de la Fundación Municipal de Servicios y en redes sociales como Twitter, Tuenti y Facebook.

Además de la guía se ofrece a los jóvenes fumadores la posibilidad de recibir apoyo y orientación individualizada o de participar en grupos de trabajo para dejar de fumar que se desarrollan en el Conseyu de la Mocedá a través de su servicio de información para jóvenes sobre salud.