Los colectivos critican la supresión del Instituto de la Juventud, mientras que el Gobierno dice dar prioridad al salario joven y al «cheque-bebé»

La política de juventud protagoniza uno de los primeros debates de la nueva legislatura, incluso antes de que arranque el primer período de sesiones de la nueva legislatura. La decisión del nuevo Gobierno regional de suprimir el Instituto Asturiano de la Juventud y delegar sus funciones en una jefatura de servicio ha motivado las protestas de colectivos juveniles y partidos políticos. Mientras tanto, Francisco Álvarez-Cascos revelaba ayer a los sindicatos mayoritarios de la región, UGT y CC OO, que el salario joven y «cheque-bebé» serán dos de los principales objetivos de su Gobierno en los próximos cuatro años y que está buscando «su encaje» en el Presupuesto regional.

«Cascos nos ha dicho que el salario joven y el "cheque-bebé" serán prioridades de su Gobierno, que no de la concertación», aseguró ayer el secretario regional de CC OO, Antonio Pino, tras reunirse con el presidente del Principado. Pino afirmó que en el acuerdo por el empleo, la competitividad y el bienestar en Asturias (ACEBA) «ya había medidas destinadas a atajar el paro juvenil y si no se han desarrollado en su totalidad ha sido por la caída de la demanda de las empresas». Cascos prometió durante la campaña electoral el salario joven y la puesta en marcha de un plan de empleo para jóvenes. En la reunión con UGT y CC OO no entró en detalles sobre dichas iniciativas.

Pero, en cambio, el Consejo de la Juventud de Gijón se sumó a las voces críticas con el nuevo Ejecutivo por su decisión de suprimir el Instituto Asturiano de la Juventud y delegar las competencias que tenía en un servicio de la Consejería de Bienestar Social. «La desaparición supone relegar las políticas dirigidas a la juventud asturiana a un servicio puramente burocrático y simbólico», cuestionó el colectivo gijonés con argumentos similares a los ofrecidos estos días por otras organizaciones juveniles. «La desaparición del Instituto Asturiano de la Juventud deja absolutamente hipotecada la presencia de los jóvenes en las políticas planteadas por el Gobierno autonómico», advirtió Carlos Fernández, presidente del Consejo de la Juventud gijonés.