Luján PALACIOS
El Ayuntamiento pedirá a la fiscalía de Menores que investigue el local de copas de la calle Cabrales que el pasado sábado organizó un striptease al que acudieron cuarenta menores de edad. El Consistorio considera urgente erradicar este tipo de actividades abiertas a la participación de los más jóvenes, que además de presenciar el espectáculo erótico también tuvieron acceso a chupitos gratis y copas a bajo precio. El bar se enfrenta a una sanción administrativa por la venta de alcohol a menores, pero también podría haber incurrido en un delito penal, un punto que, según demandan las autoridades municipales, deberá ser esclarecido por la fiscalía.
La Policía Local descubrió la fiesta en torno a las nueve de la noche del pasado sábado, cuando se encontraba realizando un servicio rutinario de control de consumo de alcohol entre menores de 16 años en el entorno del Náutico. En uno de los locales se publicitaba un espectáculo de striptease acompañado de una oferta de chupitos gratis y copas a precios reducidos, por lo que los agentes de paisano entraron en el bar. Una vez allí, vieron cómo un stripper realizaba un desnudo integral, y cómo sacaba al escenario a una chica de 15 años, «llegando a dirigir las manos de la adolescente hacia su miembro viril», tal y como informó la Policía. El Ayuntamiento ha mostrado su firme rechazo a este tipo de actividades, y reclama a la fiscalía que investigue para depurar responsabilidades.
Un oficial de la Policía que se encontraba de guardia la noche del sábado indicó ayer que todos los jóvenes -31 chicas y nueve chicos entre 13 y 16 años- fueron debidamente identificados, tras lo que se procedió a informar a sus familias. Ninguno de los menores se encontraba ebrio, según confirmó el agente, y el local contaba con todos los permisos necesarios. No obstante, y según fuentes policiales, nunca antes se había detectado en la ciudad un espectáculo de esta índole con la presencia de menores.
Según ha podido saber este periódico, algunos padres no mostraron mayor sorpresa ante la presencia de sus hijos en el local. Al parecer, alguno llegó a manifestar que no pasaba nada, porque «todos hemos tenido 15 años».
«Con los menores de edad no se juega», advierten las asociaciones de padres
L. PALACIOS
La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Gijón ha mostrado su rechazo total a la celebración de espectáculos como el de la calle Cabrales y, al igual que el Ayuntamiento, exige que se aclaren responsabilidades porque «ha fallado el control, y utilizar a menores con fines economicistas es algo muy grave». Faustino Álvarez, vicepresidente de la federación, reclama el máximo control en estos casos «para que estas situaciones no vuelvan a repetirse, y que esto no sea la punta del iceberg de algo mucho más grave». «Este mercadeo es inaceptable, con los menores de edad no se juega, y la normativa así lo contempla», sentencia Álvarez.
Carlos Fernández, vicepresidente del Conceyu de la Mocedá, considera que el striptease del sábado es «un acto condenable, y los propios hosteleros deben saber que están cometiendo un delito». Fernández apunta que «aún hay mucho que hacer en los institutos para concienciar sobre el consumo de alcohol; parece que el único objetivo es vender, sin tener en cuenta que no todo vale», subraya. Por ello, el Conceyu lanza un llamamiento a la «cordura» de los empresarios con el fin de evitar estas situaciones.
La Asociación Asturiana para la Educación Sexual, con sede en Avilés, denuncia que «estamos demasiado acostumbrados a ver el sexo como una compraventa, y en este caso estamos ante una ilegalidad flagrante». Iván Rotella, vicepresidente del colectivo, exige que los espectáculos eróticos «se ajusten al máximo a los púbicos, porque los adolescentes en la mayoría de los casos no aún no son capaces de integrar el sexo con su persona».
Se trata, según Rotella, de «educar para que el sexo sea algo que se respete entre los jóvenes, que se conciba como algo más allá de la diversión, y aquí se ha hecho todo lo contrario».
«Estas actividades no benefician a nadie», denuncian los hosteleros