También se han disparado las peticiones de trabajo entre los inmigrantes
Ya lo había advertido semanas atrás Cáritas Asturias, cuando lanzó una llamada de auxilio asegurando que la crisis le estaba desbordando y que comenzaba a tener dificultades para atender todas las peticiones de ayuda que le llegaban. Ayer tomó el testigo Cruz Roja. Su presidente regional Francisco Fernández Corte se pronunció casi en los mismos términos y aseguró también que en lo que va de año «se han disparado las solicitudes» relacionadas con empleo y alimentos. El responsable de Cruz Roja de Asturias, que ayer participó en la inauguración de los nuevos locales de la entidad, en Montevil, anunció que la ONG volverá a participar en programas de reparto de alimentos. ¿El motivo? Afrontar la avalancha de peticiones que llegan tanto a la propia Cruz Roja como al Banco de Alimentos.
Fernández Corte explicó que desde hace tres años, los planes de distribución de comida se encontraban en manos del Banco de Alimentos, «pero ante el incremento de solicitudes, nos han pedido que volvamos a colaborar con ellos». Y así lo hará. Cruz Roja reunirá a todas sus juntas locales para que estrechen la labor con los ayuntamientos. Se trata, en primer lugar, de realizar un análisis de situación más detallado. «Tenemos que llegar a sitios que a lo mejor ahora mismo no estamos llegando», precisó.
1,2 toneladas de comida
Como punto de partida están los datos que maneja el propio Banco de Alimentos, que el pasado año recogió 1,2 toneladas de comida, que distribuyó entre 166 entidades asistenciales, benéficas y sociales. En lo que va de 2009, dicha asociación ha recibido ya un 17% más de peticiones, incremento que relaciona directamente con la crisis y que, en concreto, afecta a 500 personas más en comparación con 2008. La fundación recoge alimentos tales como arroz, leche, queso, cereales, galletas, pasta, azúcar y harina. Son los llamados excedentes de la Unión Europea.
Pero no sólo se ha disparado la demanda de alimentos. También la de empleo. «Todos los días nos llegan decenas de personas, sobre todo inmigrantes, pidiendo información porque se han quedado sin trabajo», señaló Francisco Corte, quien se confesó «desbordado» y «preocupado» por los efectos de la crisis, a la que también se refirió el delegado del Gobierno, Antonio Trevín, tras afirmar que «en estos momentos, la presencia de Cruz Roja es de crucial importancia».