Cocaína y alcohol, una pareja tóxica

Mezclar cocaína y alcohol no sólo es más tóxico que tomar ambas sustancias por separado. Su consumo conjunto dispara además el riesgo de desarrollar alcoholismo en unos pocos años. Este riesgo ha sido descubierto por un grupo de investigadores españoles, encabezados por el especialista del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid Gabriel Rubio.

En concreto, la investigación desvela que los bebedores de riesgo -como son, por ejemplo, los varones que toman más de cuatro cañas diarias y las mujeres que beben más de dos- se exponen a un riesgo 3,8 veces mayor de convertirse en alcohólicos en un plazo de tan sólo cuatro años si además consumen coca. "Mezclar cocaína y alcohol, aunque la cantidad de droga sea pequeña, predispone a ser alcohólico en muy pocos años", explica Rubio, que cree que en España este patrón de consumo es "muy típico", ya que "beber es frecuente y la cocaína tiene buena fama". España está a la cabeza mundial en consumo de esta droga (3% de la población).

Combinaciones

La investigación, que también demuestra que tener una personalidad impulsiva aumenta las posibilidades de alcoholismo hasta 12,6 veces en bebedores de riesgo, reclutó en Madrid a 471 grandes bebedores no dependientes, de los que 191 consumían también cocaína. Tras cuatro años, el 67,9% de los que combinaban ambas drogas era alcohólico, frente al 13,6% de los que no tomaban coca.

El trabajo, publicado en la revista Journal of Clinical Psychiatry, concluye también que el incremento de la cantidad de cocaína consumida está asociada a una progresión más rápida hacia la dependencia alcohólica. A juicio del citado especialista, que destaca que muchos ingresos en los servicios de psiquiatría hospitalarios se deben a esta combinación de drogas, este estudio tiene también una implicación para los médicos de familia. "Ante todo paciente que tenga un consumo de alcohol de riesgo y haya tomado cocaína, aunque sea de forma ocasional, el médico debería intervenir y explicarle que se trata de una mezcla más tóxica que el alcohol y la cocaína por separado".

En cuanto al consumo de cocaína en sí, Rubio alerta de que muchos de los que abusan de esta droga tienen una baja percepción de riesgo que supone el consumo de este psicotrópico.
Aunque el experto advierte de que, "posiblemente", dos tercios de los consumidores pueden tomar cocaína de forma ocasional "sin desarrollar dependencia" a la misma, recuerda que el consumo de esta droga aumenta además el riesgo cardiovascular.